
Os presento una de las últimas intervención del interesante artista urbano
Florentijn Hofman del que ya
hablé aquí a cuenta de sus magníficas intervenciones con color naranja en las calles de
Rotterdam, ciudad en la que también cambió la apariencia de edificios poco relevantes, con la aplicación en sus fachadas de un intenso color azul, transformándolos en los más fotografiados.

También hablé de cómo aplicó pintura dorada en el pavimento de la calle principal de uno de los pueblos más pobres de los Países Bajos, para simbolizar la entrada de dinero por dicha calle. Admirables trabajos todos ellos, mínimos recursos para alcanzar máximos resultados.

Este trabajo que me ocupa hoy, es bastante menos impactante pero como me gustan los árboles y las casitas construidas en ellos, lo he querido reseñar.

El artista ha construido 2 reproducciones pequeñitas de casas tradicionales una de dos pisos con terraza, buhardilla y otra casa de tres pisos con una tienda y una buhardilla y las ha montado sobre árboles, con lo que parece que pequeños gnomos se hubieran trasladado del campo a la ciudad, sin queres perder contacto con la naturaleza.

que así se llama la pieza, es un trabajo para una escuela primaria de La Haya.

Dejo las fotos y os recuerdo otros trabajos muy interesantes con casitas en árboles, que he
publicado por aquí, las de
Nacho Carbonell me encantan.

También os invito a echar un ojo a la web de este artista que tiene intervenciones muy muy finas, otras no tanto, auque no se puede negar ingenio y gran aparatosidad.

Yo me quedo, además de las mencionadas anteriormente, con una intalación situada en un paraje verde, rodeado de una zona industrial muy urbanizada, en la que el artista, ha bloqueado la vista de la parte antiestética, mediante un espejo gigante que evita que se vea y que duplica la presencia de verde en la zona.

Espero que os guste, lo he visto
aquí.
