Didier Fiuza Faustino del estudio Mésarchitectures, ha creado una pieza de esas que me encantaría encontrar en mi ciudad, pero que por ahora sólo se puede ver en la Shenzhen & Hong Kong bi-city Biennale of Urbanism/Architecture de China.
Partió de un soporte publicitario, de esos tan comúnes en las salidas de cualquier gran ciudad, que vació de contenido publicitario, dejándolo reducido a un marco, al que acopló dos columpios.
La pieza llamada The Unbearable Lightness of Being, ha sido concebida como un dispositivo de reanimación urbana, ya que es una instalación móvil que puede adaptarse a cualquier estructura existente.
Según cuenta el creador, al usar esta instalación y probar hasta donde se quieren arriesgar, las personas pueden experimentar una nueva percepción del espacio, el vacío, la ligereza y añado yo la concepción del espacio público como zona para el juego.
Estar allí subido, permitiría escapar y dominar el terreno a través de un juego de equilibrio y desequilibrio.
De mi cosecha añado, que en un futuro podría ayudar a limpiar espacios invadidos por la publicidad, bueno... ya se que eso es totalmente irreal, pero es que hoy he salido de Madrid por la carretera de Toledo y me he quedado, por enésima vez, impresionada con la cantidad de contaminación publicitaria, que hay y eso que está prohibida...
Ahora, me imagino esa misma carretera, llena de gente columpiándose al viento y desde luego me gusta mucho más la visión.
He conocido el proyecto aquí, de donde he sacado también las fotos.
no más columpios asesinos no x favor!!! jajaja
ResponderEliminartengo malas experiencias con ellos...
hey, me he enganchado hace tiempo al blog, es genial. me gustaria contactarte en condiciones pero no encuentro el mail por ningun lado, asi que dejo una pista por si acaso. y animo y a seguir asi, que esto va muuuy bien.
ResponderEliminarsubidón de blog el tuyo...he empezado hace poco un blog "ciudad, como nos afectas?" www.losvaciosurbanos.blogspot.com y alli te he incluido por recomendaciones a tribanda....y la verdad ha sido un buen descubrimiento. felicidades.
ResponderEliminaryo compro columpio asesino.
Pensaba en mi sobrina que cuando ve un columpio no lo suelta hasta que no le riñen y como disfrutaría en él ahora que no tiene la noción del peligro. Desde luego debe ser alucinante aunque yo no me atrevo a usarlo pero me ha gustado mucho la idea. Gracias!
ResponderEliminarAlicia
A mi me recuerda ciertos rincones carcelarios (trabajé como profe unos años en una de esas casas de recogida). A mi me gustan más los columpios de toda la vida qué le vamos a hacer.
ResponderEliminarUn saludo Remedios.