viernes, 18 de julio de 2008

Ahora lo veo, ahora desaparece en el paisaje


Hoy un poquito de arte publico de camuflaje, obra de Joshua Callaghan, artista que también flirtea con la calle y que aún no ha sido fichado en Eko System y Wooster Collective. Digo esto porque tengo por norma, rota alguna vez, no comentar nada que haya salido recientemente en estas dos publicaciones, tienen tanta difusión que no me gusta ser repetitiva.


Bueno pues la obra de este artista consiste en camuflar mobiliario urbano, pero del más feo que existe y que son esos armarios donde se guarda, yo qué se qué y que, y que se reproducen como setas en medio de las calles.


Lo que él hace es tomar fotos del entorno en el que está situado el armario, caseta o como se llame, elige una para cada uno de los lados y vinila con ellas el objeto seleccionado. Se supone que si te situaras en el punto de vista desde el que se disparó la foto, el mamotreto pasaría totalmente desapercibido.


Para sus intervenciones, ha elegido sobre todo paisajes con gran profusión de vegetación, muy playeros y que se reconocen como típicamente californianos.


Ha realizado sus juegos ópticos en ubicaciones como Playa Vista, en el Renessance Hotel de Hollywood, en el Kirk Douglas Theater y en Culver City, todas ellas en California, todas ellas bastante horteras.


Este artista también expone en galerías y como digo siempre, es fácil que lo que en la calle parezca bueno, en interiores desmerezca. Aquí creo que tenemos un claro ejemplo.


El arte urbano de este artista tiene grandes coincidencias con un trabajo que me encanta y que para mí tiene una calidad artística muy superior a la de Joshua, se trata de las maravillosas intervenciones de Cayetano Ferrer de las que ya he hablado en este blog, no hay color....






11 comentarios:

  1. Hace un par de años, en Madrid Abierto se presentó una obra algo similar (en realidad no es tan raro que la misma idea se le haya ocurrido a dos artistas distintos): la de Arnoud Schuurman. Schuurman utilizaba los paneles publicitarios y los sustituía por fotografías que reflejaban aquello que se encontraba detrás de ellos. Va, venga, miradlo aquí, que ya me estoy enrollando de más.

    Un beso!

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  2. Pues si que tiene bastante que ver la obra del tal Schuurman, no lo conocía y me gusta eso de utilizar los soporte publicitarios para otra función que no sea la de poner anuncios.

    Ya se que no es raro que a varios artistas se les ocurra lo mismo por eso a mí me gusta enfrentarlos, siempre hay alguno que sale mal parado.

    Lo que me llama la atención de los dos ejemplos que he puesto, es cómo partiendo de una idea muy similar, a uno le ha salido una obra tan sutil y creativa, mientras al otro le ha quedado mucho más evidente y chabacana, supongo que también sería eso lo que pretendía...

    Saludos Guillermo, a lo mejor nos vemos en el Summercase esta noche.

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  3. Maldita la gracia, no había visto la referencia a Cayetano Ferrer en el post (qué mal leo). ¿Viste que le mencioné en la entrada sobre el libro de Francesca Gavin?

    Y sí, nos vimos en el Summercase, vaya. Disculpa la poca atención, me pilló en un momento de subidón hidrigenessiano (o era The Knife lo que sonaba). Bueno, pues eso. ¿Vas mañana también?

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  4. Hola Remedios
    qué tal el largo y cálido verano
    ya tengo internet de nuevo,me alegra volver a visitar tu página y ver todas las cosas interesantes que enseñas en ella,gracias
    un abrazo iluminado

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  5. Hola Guillermo, al final creo que hoy no voy al Summercase aunque tengo la entrada, quizás a última hora... no te preocupes por la atención, un festival no es precisamente el mejor sitio para mantener una conversación fluida.

    Me encanta Cayetano Ferrer, es de los mejores que deja su arte por las calles, ya vi que lo mencionaste.

    Saludos

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  6. Hola Haquiles2001, que bien tenerte de vuelta en el mundo virtual.

    Enhorabuena por tu exposición, espero que hayas cosechado muchos éxitos.

    Te sigo para ver los resultados.

    Besos

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  7. En 5º de carrera presenté un proyecto prácticamente igual a este para la asignatura de Arte y Espacio Arquitectónico, no me sorprende porque es fácil pensarlo, aunque en mi caso lo desarrollé como medio para camuflar grandes edificaciones como crítica a la regulación urbanística de algunas ciudades, es muy fácil que las ideas se repitan, supongo que la diferencia radica en su puesta es escena.
    Saluditos

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  8. de puro sencilla la idea es buena

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  9. Alicia, si que parece evidente que a más de uno se les ocurra alguna de estas soluciones de camuflaje, los trampantojos existen desde que el mundo es mundo, por eso aprecio tanto al obra sutil de Cayetano Ferrer y esta... pues algo menos...

    Amor y libertad, gracias por el rato largo que me has dedicado hoy.

    Saludos a ambos

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  10. creo que esta idea debería apropiarsela los ayuntamientos y utilizarla para camuflar todo ese mobiliario urbano que no aporta nada al paisaje urbanístico de manera que, aunque engañados, disfrutaríamos de una ciudad un poquito más bonita.

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  11. Aliencito, creo que esto de camuflar artísticamente no se nos da muy bien ya que estamos en el país de los tapajuntas y maceteros.

    Si algo no queda bien rematado utilizamos un tapajuntas para disimular y si está desastroso pues recurrimos a un macetero puesto delante...

    saludos

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