martes, 15 de julio de 2008

Tom Waits, el mago de las mariposas


Anoche asistí al espectáculo más grande del mundo, fui al circo y vi magia musical, sí, el mago fue Tom Waits, que con su garganta herida, su desamparada y cruda poesía, su trabajado piano y sus infernales acordes, fue capaz de ponerme en estado de levitación, sin truco ninguno.


Tengo que decir que para este acontecimiento, esperado durante años, ya llegaba preparada, había estado concentrada en él durante semanas, me había escuchado todos sus discos y había hecho introspección con ellos, así que ya llevaba de casa los sentimientos a flor de piel de gallina.


Ya con la segunda canción empecé a notar que jugueteaba con mi estómago, sentí una especie de sensación de vértigo y creí que me iba a doler, pero para nada, no se cómo lo hizo, el truco del artista no se puede revelar, que cuando me di cuenta, había abierto la jaula donde guardo las mariposas que me habitan el estómago y que baten sus alas en momentos de gran emoción y las había dejado en libertad.


Con el ritmo desquiciado de su música, este Flautista de Hamelin, de mariposas, se las llevó todas consigo, creo que las del que estaba sentado a mi lado también se fueron y las de muchos otros.


Él se las guardó en su ajado sombrero de hongo y en un momento dado, creo que cuando cantó You´re innocent when you dream las esparció por la sala, después le acompañaron en su recorrido musical por el infierno y otros sitios tristes y decrépitos de la creación, dejándome a mí un hueco en el estómago.


Seguro que a estas horas las está domesticando para que actúen en su circo de pulgas o es posible que las haya pinchado con alfileres en su colección particular.


He leído que para alguno, el concierto no fue perfecto, que el sonido fue deficiente, que no hubo total comunión con el público y lo único que yo puedo decir es que a mí me dejó sin fuerzas, sin palabras y sin mariposas con lo que me había costado guardarlas para que me hicieran cosquillas...


Y bueno, como no quiero que esto se convierta en un blog donde cuento mis historietas personales, voy a ilustrar todo este rollo sensiblero con la obra de dos fotógrafos que de alguna manera me han hecho pensar en la música de Tom.


Puede ser entre otras cosas porque sus trabajos de rara delicadeza y universos oníricos, son muy apropiados para portadas de disco o porque me transportan a mundos artificiales, habitados por seres extraños y crueles, tendentes al blanco y negro, como la música de Waits.


Los artistas son Robert & Shana ParkeHarrison y es mejor que veáis las fotos en su web.












5 comentarios:

  1. Querida Remedios

    Déjame decirte que nunca había escuchado nada sobre Tom Waits y me estaba perdiendo mucho. Tiene una voz que te para los pelos. Para mi fue amor a primera vista, lo escuché en YouTube y no hubo tema que no me estremeciera, el tipo es mago en todo el sentido de la palabra y los videos son otro tema. Nooo!!!, es que se paso este Tom Waits, veré si encuentro algo de su música acá en Chile...

    y las fotos espectaculares...

    Besos!!!

    ResponderEliminar
  2. las fotos geniales, waits me encanta

    ResponderEliminar
  3. Yo tambien llevaba años esperando y vi a Tom Waits en primera fila en San Sebastian....

    Sólo puedo decir;
    Uffffffffffffffff

    ResponderEliminar
  4. Tom Waits es un afónico crónico con buen oído.

    ResponderEliminar
  5. Rurimor, puede que tengas razón, yo no puedo ser impacial, el caso es que a mi me encanta y no solo por su voz afónica, también sus letras me conmueven.

    Saludos

    ResponderEliminar